Sumerjido -que no equivale a escondido- en el trabajo muralista el Mono" como le conocemos ha plasmado su arte en los muros de Chile, haciendo escuela con las nuevas generaciones. Quienes hemos tenido la suerte de acompañarle en decenas de estos empeños artísticos, de alguna manera llegamos a entender el porque pasaron tantos años sin que expusiera su trabajo como merece. Es por eso que esta muestra que acoge la Biblioteca de Santiago es una extraordinaria oportunidad de apreciar el trabajo de quien desde el intimismo de "lo privado" se sumerje en el espacio de "lo público" con la estética del trazo grueso de ribetes negros que ha influenciado a toda una generación con su estética muralista.
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"Lo público y lo privado" de Alejandro "Mono" González Del arte brigadista al íntimo refugio de la infancia
Los paraísos perdidos suelen ser cosas sencillas, un paisaje, olores, texturas. Generalmente situados en una infancia que, como para Machado, puede ser simplemente el recuerdo del patio donde jugamos. Para Alejandro "Mono" González, fundador de las Brigadas Ramona Parra y de una verdadera iconografía nacional, ese espacio de seguridad y ternura tiene que ver con las telas que lo cobijaban, ellas son el fundamento para las obras que presenta en la Biblioteca de Santiago a partir del 2 de agosto.
El arte brigadista, la transformación del espacio público en espacio para el arte y del arte en lenguaje para el cambio social, ha sido una preocupación constante para el "Mono" González desde que participó en la fundación de las Brigadas Ramona Parra al comienzo de la década de 1970. En este contexto surgió una iconografía particular vinculada a los movimientos de izquierda chilenos. Manos, rostros, palomas trazados con líneas gruesas y rellenos con colores planos que debían ser pintados de forma clandestina en el menor tiempo posible. Como señala el artista, "busco la síntesis de las imágenes y este método, que he hecho propio como actitud, ha sido un regalo de la calle, su premura, rapidez y urgencia me han lleva a esa síntesis".
En "Lo público y lo privado", su primera muestra individual después de mucho tiempo, que inaugura el Jueves 2 de Agosto a las 19:00 horas en la Sala Zócalo de la Biblioteca de Santiago, su intención ha sido conjugar este arte muralista con una expresión más íntima, ligada a la técnica serigráfica que practica en su taller. Para ello eligió como soporte un elemento que en su memoria representa la infancia, las telas de sacos harineros con que estaban hechas sus primeras sábanas, las cuales lo fascinaban también por sus logotipos impresos y le recuerdan el cobijo familiar.
En esta exposición presentará 15 lienzos de 60x70 cm. que corresponden a las dimensiones de un saco harinero, los que han sido impresos con pintura hecha de tierra de color y engrudo, además de dos obras en gran formato que se situarán en la Plaza de la Biblioteca. Una metáfora que funde la historia del arte muralista de nuestro país y la biografía de uno de sus cultores más destacados, metáfora que continuará su desarrollo con el paso de los días, ya que el "Mono" González instalará su taller serigráfico en la Sala Zócalo y continuará creando obras hasta que la exposición finalice el 31 de agosto.
Mi canto es un cantro libre que se quiere regalar
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